De repente leyendo a Murakami, tuve un recuerdo de algo que repetí una y otra vez... hace no mucho tiempo, y que sigue estando en mi cabeza. Y justamente esta frase lo dice todo.
Aquella niña de diez años me agarró la mano y cambió por completo algo que había en mi interior. No sé explicar de manera lógica cómo pudo suceder algo así. Pero en ese momento nos comprendimos uno al otro y nos aceptamos de manera natural. Por completo, casi de forma milagrosa. Esas cosas no ocurren muchas veces en la vida. No, probablemente sólo ocurran una vez.